Pfizer redujo los precios de sus medicamentos en Estados Unidos y anunció una inversión de 70 mil millones de dólares para ampliar su capacidad de fabricación en el país, tras meses de presiones del gobierno estadounidense. El presidente Donald Trump y el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, dieron a conocer el acuerdo en la Casa Blanca, en un acto que calificaron como un cambio histórico en la política farmacéutica del país.
Bourla destacó que este día marca un giro en la tendencia, señalando que por años, los estadounidenses han asumido costos excesivos por los medicamentos. La compañía ajustará los nuevos precios siguiendo las directrices del gobierno, que en julio solicitó a 17 farmacéuticas igualar sus tarifas con las más bajas en países desarrollados.
Según la Casa Blanca, estas medidas podrían beneficiar a hasta 100 millones de personas, evitando que tengan que comprar medicinas en otros países como Canadá o México. Además, Trump concedió a Pfizer un período de tres años para trasladar su producción a Estados Unidos, exento de aranceles del 100 por ciento en medicamentos importados a partir del 1 de octubre.
Bourla también se comprometió a realizar una inversión de 70 mil millones de dólares en los próximos años para expandir la producción en EE.UU., convirtiendo a Pfizer en la primera farmacéutica en responder a la orden ejecutiva firmada en mayo, que estipula reducir precios en 30 días. En caso de no alcanzarse acuerdos, el gobierno podrá establecer precios según el criterio de 'nación más favorecida', igualando las tarifas más bajas del mercado internacional, aunque esta medida solo aplicará a medicamentos cubiertos por Medicare y Medicaid.
El presidente Trump reiteró que los estadounidenses subsidian a otros países, en particular en Europa y Canadá, al pagar precios más altos por los mismos medicamentos. La Casa Blanca también anunció la creación de la plataforma TrumpRx, destinada a comprar medicamentos directamente del gobierno a precios reducidos, aunque aún se desconoce qué productos estarán incluidos o si beneficiará a personas con seguro médico.
El secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., comentó en tono de broma que la insistencia presidencial en resolver el problema le había generado ansiedad, pero reconoció que ello representa un liderazgo verdadero.