Preocupación en Toluca por desgajamiento peligroso en límites de la Teresona y San Mateo Oxtotitlán

Por: Equipo de Redacción | 29/06/2025 10:30

Preocupación en Toluca por desgajamiento peligroso en límites de la Teresona y San Mateo Oxtotitlán

Desde hace ocho años, los vecinos de la zona entre la Teresona y San Mateo Oxtotitlán en Toluca enfrentan un grave problema de desgajamiento en los límites territoriales, situación que ha ido agravándose y que ahora representa una amenaza para las familias y quienes transitan en la zona.

En la calle de Niños Héroes, ubicada detrás de la gasolinera, una ladera se ha formado debido a la caída de tierra, formando un hoyo que pone en riesgo tanto las viviendas cercanas como la seguridad de los peatones. Cristina, residente del lugar, expresó su preocupación: ‘Sí da miedo pasar y ver ese hoyo en la pared, yo digo que los que podrían estar más en riesgo son las casas que están junto’.

Tras un recorrido realizado por El Sol de Toluca, se pudo constatar que varias construcciones en las inmediaciones, incluyendo hogares, están en peligro de sufrir daños en caso de un mayor desprendimiento. El problema no es nuevo: en 2017, en esa misma zona se produjo un hundimiento de tierra que afectó a más de 200 personas, siendo atribuido por las autoridades y la comunidad a la construcción de una gasolinera en el sitio.

Las protestas que algunos vecinos llevaron a cabo para impedir que la gasolinera continuara su operación en ese entonces no lograron detener su funcionamiento. Casi una década después, la población denuncia que las acciones de construcción fueron irregulares, contribuyendo al deslizamiento de rocas y tierra en la zona. Cristina comenta: ‘Esto no estaba así, se empezó a hacer después de que metieron la máquina para excavar y abrir la tierra, pero no supieron cómo; luego solo rellenaron’.

Las recientes lluvias de mayo y junio, que han reblandecido aún más la tierra, han empeorado la situación, incrementando la caída de piedras y el desprendimiento de tierra. José Luis, otro vecino, explica: ‘Viene el agua, y la tierra se pone blanda; con las lluvias fuertes, tira las piedras y también la tierra’.

Asimismo, la caída de rocas, fragmentos de infraestructura y lodos cubren el suelo, dando la impresión de una área montañosa o de alto riesgo, aunque en realidad se trata de una zona urbana. Los residentes esperan que las autoridades, especialmente Protección Civil, acudan pronto al sitio para evaluar la situación, informar sobre los riesgos y definir las medidas a seguir.

‘A lo mejor uno piensa que es mucho el peligro, pero no es así. Solo las autoridades pueden determinar la gravedad; nosotros simplemente queremos que nos informen’, finalizó Cristina.