El año 2025 trae cambios en el calendario de jubilaciones en España, donde la edad legal para recibir la pensión completa ahora es de 66 años y ocho meses. Sin embargo, para quienes hayan cotizado al menos 38 años y tres meses, la jubilación puede hacerse a los 65 años. Además, existe la posibilidad de adelantar la jubilación hasta 24 meses antes, es decir, a los 64 años y ocho meses, si se acreditan al menos 35 años cotizados.
Pero ciertos trabajos bajo condiciones extremas o peligrosas permiten retirarse incluso antes, gracias a coeficientes reductores que ajustan la edad mínima según el riesgo y el desgaste físico o mental. La ley reconoce que no todas las ocupaciones implican el mismo nivel de deterioro.
Entre las profesiones con jubilación anticipada más destacadas, los mineros son los que más temprano pueden retirarse, a partir de los 50 años, dependiendo de los años cotizados y la función desempeñada, debido a las condiciones peligrosas e insalubres en la minería, como altas temperaturas, polvo, ruido y riesgo de accidentes.
El sector marítimo también contempla adelantos: pescadores, marineros y estibadores pueden jubilarse a los 55 años, e incluso a los 52 en ciertos casos, por la exposición a condiciones meteorológicas adversas y esfuerzo físico constante.
Asimismo, los bomberos tienen permitido retirarse desde los 58 años, debido a los riesgos asociados a su labor de alto estrés, turnos largos y exigencias físicas. Lo mismo aplica a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, quienes pueden hacerlo entre los 59 y los 60 años.
En el ámbito aéreo, pilotos, controladores y tripulantes de cabina también gozan de la posibilidad de jubilarse antes, a partir de los 55 años, debido al estrés, las exigencias psicológicas y los turnos en diferentes husos horarios.
Profesionales del espectáculo, como bailarines, acróbatas o artistas de circo, con carreras cortas por desgaste físico, también pueden optar por dejar su actividad a los 55 años.
Por último, trabajadores expuestos a sustancias tóxicas o entornos peligrosos, como empleados en industrias químicas o nucleares, así como conductores de vehículos pesados, tienen la opción de retirarse antes de los 60, siempre que acrediten la exposición a riesgos laborales continuados.