Desde los ocho años, Miley Cyrus se inició en la música. Sin embargo, los altibajos en su carrera de más de veinte años le han provocado problemas de alcoholismo, adicciones y el desarrollo del trastorno de Edema de Reinke, que afecta sus cuerdas vocales y modifica su voz.
La cantante y ex estrella infantil de Disney reveló en una entrevista para The Zane Lowe Show de Apple Music que su estilo de vida de excesos, incluyendo desvelos, consumo de alcohol y tabaco, ha tenido consecuencias en su salud vocal.
“Tengo Edema de Reinke... es un daño a las cuerdas vocales. Tener 21 años y desvelarse, bebiendo y fumando, y salir de fiesta después de cada show no ayuda”, expresó Cyrus durante la charla.
Su mayor temor es someterse a una cirugía para tratar el trastorno, ya que fue diagnosticada con un pólipo grande en sus cuerdas vocales. Este padecimiento le da a su voz el tono y la textura ronca que la caracteriza. Existe el riesgo de que, tras la operación, su voz no vuelva a ser igual.
El Edema de Reinke, también conocido como corditis polipoidea, es un trastorno benigno en las cuerdas vocales que provoca disfonía progresiva, con una voz ronca y un tono más bajo. A menudo, se asocia con el tabaquismo, el hipotiroidismo y el reflujo gastroesofágico. Su causa principal es la acumulación de líquido o gel en el tejido de las cuerdas vocales, lo que disminuye la potencia vocal y produce una voz más grave de lo habitual.
El tratamiento para este trastorno incluye logopedia, dejar de fumar y, en casos necesarios, intervención quirúrgica. La cirugía consiste en aspirar el contenido gelatinoso y remover el exceso de mucosa, conocida como fonomicrocirugía. Sin embargo, existe la posibilidad de que la voz cambie tras la operación debido a la formación de cicatrices y adherencias en el subepitelio, lo que podría alterar su tono vocal.