¿Alguna vez te preguntaste qué pasa con esa amenaza que parecía invencible en Ecatepec? La Chokiza, la banda criminal que infundía temor en el Estado de México, ha cambiado de rostros, pero ¿realmente ha desaparecido? La respuesta te sorprenderá.
Todo comenzó con la captura de 'El Choko', Alejandro Gilmare Mendoza, el 10 de septiembre de 2025, en una plaza comercial en Ecatepec. Aquella mañana, las fuerzas de seguridad rompieron la calma del centro comercial del Fraccionamiento Las Américas, a solo cinco kilómetros del corazón de San Cristóbal, Ecatepec. Vehículos blindados, oficiales en acción y una operación que dejó a todos en shock.
Durante la operación, 'El Choko' fue detenido junto a su madre y colaboradores cercanos. Ocho días después, fue vinculado a proceso por delitos de delincuencia organizada y secuestro. Desde entonces, su figura se convirtió en el centro de atención, dejando en duda quién tomó realmente las riendas de La Chokiza.
¿Y quiénes están ahora al mando? Según la Fiscalía General de la República (FGR), los nuevos líderes son Ariel 'N' e Israel 'N', conocido como 'El Lic'. Además, en octubre, el periodista Carlos Jiménez confirmó que el hermano de 'El Choko', David 'N', ingresó como supuesto relevo para continuar con las extorsiones y delitos asociados.
Pero, ¿cómo operan estos criminales y cómo lucen sus perfiles en redes sociales? La organización no ha desaparecido del todo. En TikTok y Facebook, miembros de La Chokiza presumen con orgullo su pertenencia, usando emojis como una tableta de chocolate y un ninja. La caricatura de Jesucristo en motocicleta, acompañada de billetes, es su símbolo. A pesar de las detenciones, siguen invitando a otros a unirse, ofreciendo supuestos beneficios: asesoría legal, protección y apoyo en su seguridad.
¿Y qué son exactamente sus delitos? La Chokiza está vinculada a homicidio, invasión de propiedades, narcomenudeo, y los más denunciados: extorsión y préstamos 'gota a gota'. En Ecatepec y municipios cercanos, comerciantes y conductores son forzados a pagar cuotas semanales, bajo amenazas de violencia física, ataques o incluso incendios. En abril de este año, se difundió una llamada en la que un integrante exigía colaborar o 'quedar con el local quemado'.
Pese a las detenciones, la banda continúa llamando a que la gente se una, promoviendo que unirse no cuesta nada y que su objetivo es 'ayudar a la gente'. En redes, ofrecen beneficios como protección, asesoría y seguridad las 24 horas, apoyos jurídicos, y hasta protección para repartidores de aplicaciones.
¿El panorama está controlado? La realidad indica que no. La autoridad mexiquense ha identificado al menos nueve sindicatos dedicados a extorsionar en la región, operando con la misma fachada de organización. La lucha contra La Chokiza y sus grupos hermanos continúa, pero su historia deja claro que, aunque cambien los nombres y rostros, el miedo y las formas del crimen parecen mantenerse, solo en espera de quién será el próximo líder que tome las riendas.
