¿Alguna vez te has preguntado qué puede suceder en un abrir y cerrar de ojos en una carretera? La noche del domingo, esa pregunta cobró una trágica realidad en la carretera Toluca-Palmillas, cuando un joven perdió la vida en un accidente que aún no ha sido completamente esclarecido.
Todo ocurrió alrededor de las 9 de la noche, en un paraje conocido como El Tejocote, en el carril lateral con dirección hacia Ixtlahuaca. Ahí, un motociclista —que vestía un pantalón beige y una chamarra negra— cayó de su unidad, una moto marca Itálika color rojo, y quedó tendido en la carretera.
Automovilistas que transitaban por el lugar vieron la escena y no dudaron en reportar el incidente a los servicios de emergencia. Al llegar, los paramédicos del Servicio de Urgencias del Estado de México (SUEM) y oficiales de la Policía Municipal se movilizaron para controlar la circulación y brindar atención.
Pero, a pesar de sus esfuerzos, el joven, de entre 20 y 30 años de edad, perdió la vida debido a las lesiones que sufrió en su cuerpo. ¿Fue un accidente? ¿Lo empujaron? Hasta hoy, las autoridades aún buscan respuestas.
Peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) llegaron al sitio para levantar el cuerpo, pero no pudieron identificarlo porque no portaba credenciales o documentos. La causa de la caída y si hubo alguna intervención externa sigue siendo un misterio que las autoridades intentarán resolver con las investigaciones en marcha.
Este trágico incidente no solo impactó la vida de un joven, sino que también generó afectaciones en la circulación de la zona. ¿Qué seguiría si se averiguara la verdad detrás de este suceso? Solo el tiempo y la investigación lo dirán.