En la lateral de la carretera México-Toluca con dirección a Lerma, se ha formado un gran charco de agua que ocupa ambos carriles, con un nivel aproximado de 20 centímetros, cubriendo el paso peatonal y dificultando la circulación. Este encharcamiento se ubica metros antes de la entrada a San Pedro Tultepec, comunidad de Lerma, justo frente a una compañía automotriz china. La acumulación ha sobrepasado la carretera e ingresado al terreno del establecimiento, según denuncian automovilistas.
Los conductores que transitan frecuentemente por la zona señalan que este problema se repite cada temporada de lluvias, pero en esta ocasión, la magnitud ha aumentado debido a las recientes precipitaciones intensas. Daniel, automovilista y vecino de Lerma, comentó: ‘Cada vez que llueve, ahí se estanca el agua, pero esta vez el charco se hizo más grande, seguramente por la intensidad de las lluvias en estos días’.
Los vecinos y conductores atribuyen este encharcamiento a las condiciones geográficas del lugar y a la deficiente infraestructura de coladeras: ‘El agua no tiene por dónde irse, la superficie es plana y hay pocas salidas de agua’, explicó un residente.
Transitar por este punto se ha convertido en un reto, ya que los automovilistas optan por cruzar con precaución o regresar para evitar que sus vehículos se queden estancados o que el agua ingrese a los autos. Además, la acumulación de agua ha agravado el estado de la carretera, que presenta baches que se ocultan bajo el agua, aumentando el riesgo de daños en los vehículos.
Son principalmente tractocamiones y autobuses los que continúan su paso sin reducir la velocidad, debido a su tamaño, pero esto contribuye a la formación de nuevas oquedades y deterioro del pavimento, afectando también a vehículos más pequeños, detallaron los conductores. Daniel agregó: ‘Pasan y te lanzan agua, y el peso y tamaño de las llantas provocan que los baches sean más grandes y que el pavimento se desgaste’.
Durante las lluvias, las comunidades y municipios cercanos enfrentan dificultades similares, ya que las vialidades se vuelven imposibles de transitar de manera segura, con charcos que amenazan patrimonios y bienestar. Un ciudadano mencionó: ‘Si tomas la avenida Las Torres, también se inunda en San Mateo Atenco, y si eliges otra ruta, encuentras charcos grandes; no hay vías alternas buenas’.
Por ello, vecinos y automovilistas solicitan la intervención de las autoridades para evitar que el problema se agrave y provoque vías intransitables o accidentes mayores. Este problema no es exclusivo de la carretera México-Toluca, ya que también se ha presentado en otras vialidades como la autopista Lerma-Tenango del Valle y la carretera Toluca-Naucalpan, donde la situación también ha sido reportada y compartida por esta casa editorial.