Este martes 4 de noviembre, los reyes Felipe VI y Letizia recibieron al sultán de Omán, Haitham Bin Tarik, en el Palacio Real de Madrid, en una visita de Estado que marca el regreso de las ceremonias oficiales tras más de dos años de pausa por la pandemia y agendas internacionales. La visita, que resalta el papel estratégico de Omán en la región, incluyó una serie de actividades protocolarias y culminó con una cena de gala en la que Letizia lució joyas históricas y un vestido de alta gala.
La recepción oficial inició a las 10:30 horas, con todos los rituales tradicionales, en un Palacio Real decorado para la ocasión. El encuentro contó con la presencia de los padres de la princesa Leonor y la ausencia de la esposa del sultán, quien habitualmente viaja acompañado. La Casa Real mantuvo el protocolo de Estado, enfatizando la importancia diplomática del encuentro y la cercanía de los monarcas españoles.
Durante la jornada se llevaron a cabo un almuerzo en el interior del palacio, a las 14:15 horas, y una audiencia en la Zarzuela a las 13:30 horas. La noche culminó con una exclusiva cena de gala, celebrada en el Gran Salón del Palacio Real, la primera desde la visita del presidente de Colombia, Gustavo Petro, en mayo de 2023. Este evento simbólico representó la reanudación de la normalidad institucional en la residencia real, afectada por la pandemia y agendas internacionales.
Desde que Haitham Bin Tarik asumió el trono en 2020 tras la muerte de su primo, el sultán Qabús, Omán ha reforzado su papel geopolítico en la península arábiga. La visita refuerza los lazos bilaterales y la cooperación en política exterior, además de destacar la importancia regional de Omán en un contexto de equilibrio estratégico.
En el aspecto ceremonial, el sultán aportó una oportunidad para que la Casa Real desplegara su protocolo más tradicional, especialmente en honores militares y actos de Estado. La cena, que inició a las 20:00 horas, generó gran expectación, en particular por las elecciones del despliegue de joyería y vestuario de la reina Letizia, quien lució su tiara más emblemática, la Flor de Lis, y llevó un collar de la Orden de Omán, un regalo personal del sultán que simboliza la amistad entre ambos países.
Letizia opting por un vestido satinado azul zafiro de The 2nd Skin Co, complementado con pendientes históricos regalados por el anterior sultán a la reina Sofía en los años 80, añadió un toque de historia y diplomacia visual al evento. La reina también lució unas joyas únicas, incluyendo pendientes y la tiara, en un homenaje a la amistad y la historia compartida.
El anfitrión, el rey Felipe VI, dirigió un discurso que destacó las similitudes entre España y Omán, incluyendo su interés en la paz en Palestina y la cooperación internacional. Durante la cena, la interacción entre ambos monarcas fue notable: compartieron sonrisas, conversaron y demostraron una complicidad que reforzó los lazos entre ambas naciones, en un acto lleno de simbolismo y política diplomática.