
El presidente nacional del PAN, Jorge Romero Herrera, acusó al partido Morena de legislar con fines dirigidos a impedir que tanto empresarios como ciudadanos puedan defenderse mediante amparos frente a abusos del poder. Romero señaló que, en un acto irónico, Morena aprobó reformas conocidas como las ‘leyes espía’, que facilitan a las autoridades acceder a datos personales y de ubicación de los ciudadanos, y que el PAN respondió promoviendo más de 10 mil amparos para proteger derechos frente a esas prácticas.
Sin embargo, afirmó que la reciente reforma a la Ley de Amparo, aprobada en el Senado, representa un obstáculo para ese esfuerzo, al señalar que dicha modificación impide que los mexicanos que han promovido amparos puedan continuar defendiendo sus derechos, al introducir reglas de retroactividad que, según explicó, contravienen el artículo 14 de la Constitución.
Romero sostuvo que esas reformas —que permitirían resolver juicios en trámite bajo las nuevas reglas— violan la Constitución, pues una ley secundaria no puede contraponerse a ella ni tener efectos retroactivos, a menos que se modifique la Constitución, lo cual no ha ocurrido.
El dirigente del PAN advirtió que la finalidad de Morena sería bloquear los recursos legales que los ciudadanos han presentado contra legislaciones en telecomunicaciones que consideran abusivas. «Promovimos amparos contra las ley espía, y ahora responden con otra reforma que busca impedir que los ciudadanos puedan ampararse contra esas leyes», indicó.
Romero llamó a la ciudadanía a continuar promoviendo amparos contra la reforma, resaltando que se trata de un asunto que afecta a todos, no solo a partidos políticos. «Nos quieren quitar lo poco que queda de derecho para defenderse, y el PAN no dejará de usar las herramientas legales disponibles», afirmó.
Por último, Romero informó que estarán atentos a la actuación de los jueces y magistrados que sean designados para entender si seguirán sirviendo a los intereses del pueblo o si simplemente cumplirán con las imposiciones del gobierno, en un contexto que calificó como de arbitrariedad.