La presidenta Claudia Sheinbaum informó que, como parte del próximo programa del bienestar “Sin maíz no hay país”, se fortalecerá el banco de germoplasma, una reserva que preservará las 59 razas nativas de maíz que existen en México. Durante la conferencia matutina de este lunes, la mandataria recordó que durante su gestión como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, impulsó un banco de germoplasma, y que la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) cuenta actualmente con otro. "¿Qué es un banco de germoplasma? Es un espacio que resguarda diferentes variedades de maíz, cada una con una genética única, fundamental para conservar la diversidad que existe en nuestro país", explicó Sheinbaum. Agregó que, además de los bancos existentes en la ciudad y en algunos estados, el nuevo fortalecimiento buscará consolidar un sistema nacional que garantice la preservación de estas variedades. Este esfuerzo forma parte del programa de bienestar “Sin maíz no hay país”, cuya finalidad principal es apoyar a los productores para preservar el cultivo y promover prácticas sostenibles. "Este programa, que pronto presentaremos, busca también fortalecer un banco de germoplasma para conservar el patrimonio genético del maíz, además de brindar recursos adicionales a los pequeños productores", afirmó la mandataria. En el marco del Día Nacional del Maíz, la secretaria de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, resaltó que México fue uno de los primeros países en domesticar plantas para consumo humano, desarrollando alrededor de 200 especies, entre ellas el maíz, domesticado hace más de nueve mil años. Explicó que en México existen 64 razas de maíz, de las cuales 59 son nativas, y destacó la reciente reforma constitucional que reconoce la importancia del maíz para la identidad y seguridad alimentaria del país. La reforma prohíbe el uso de maíz transgénico en cultivos mexicanos y establece regulaciones estrictas para su manejo, además de fomentar la conservación de la biodiversidad y el manejo agroecológico de las variedades nativas. Esta legislación refuerza el carácter patrimonial del maíz y sus parientes silvestres como componentes fundamentales del patrimonio biológico, económico y cultural de México.