Este miércoles, Israel intensificó los bombardeos en la Ciudad de Gaza, en medio de la incertidumbre sobre la respuesta del movimiento islamista Hamas, que aún analiza el plan de paz propuesto por Donald Trump para poner fin a casi dos años de conflicto.
El presidente estadounidense dio un plazo de “tres o cuatro días” a Hamas para aceptar su propuesta, que cuenta con el respaldo del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. La iniciativa contempla un alto el fuego, la liberación de rehenes israelíes en 72 horas, el desarme de Hamas y una retirada gradual de las tropas israelíes en Gaza.
El plan también propone una autoridad de transición liderada por Trump, en la que participaría, entre otros, el ex primer ministro británico Tony Blair. Según una fuente palestina cercana a Hamas, aún no hay una decisión definitiva, ya que el grupo necesita “dos o tres días” para responder y busca modificar algunos aspectos, como el desarme y la expulsión de altos cargos del movimiento.
Hamas exige garantías internacionales de que Israel se retirará completamente de Gaza y que cesarán los asesinatos en el interior y exterior del territorio. Aunque la propuesta de Trump contempla el desarme completo y la exclusión de Hamas del gobierno futuro, también ofrece amnistías a combatientes que acepten convivir pacíficamente con Israel.
Mientras tanto, los bombardeos en Gaza no se detienen. La ofensiva israelí, que comenzó el 16 de septiembre, mantiene en un estado de tensión constante a los residentes. Rabah al Halabi, un palestino de 60 años, expresó vía telefónica: “Las explosiones no paran”.
El conflicto se intensificó tras un ataque masivo de Hamas en el sur de Israel el 7 de octubre, que dejó más de 1,2 mil personas fallecidas y 251 capturadas, de las cuales 47 permanecen en Gaza, algunas reportadas muertas por el ejército israelí.
El Comité Internacional de la Cruz Roja suspendió sus operaciones en Gaza, alertando sobre la grave situación de civiles desplazados y en riesgo. Además, Israel emitió una advertencia última para que los habitantes abandonen Gaza, considerando a quienes permanezcan como colaboradores del terrorismo.
En Gaza, la situación sigue crítica: al menos seis personas murieron en un ataque a una escuela de desplazados y siete en un ataque contra una vivienda en la ciudad. La Defensa Civil ha confirmado estas muertes, y las cifras oficiales del Ministerio de Salud del territorio reportan más de 66 mil muertos palestinos, en su mayoría civiles.
Dentro de las negociaciones en Doha, Catar, existen diferencias internas en Hamas respecto al plan estadounidense. Una facción apoya una aprobación incondicional para lograr un alto el fuego, mientras otra rechaza el desarme y busca condiciones más estrictas.
La escalada de violencia continúa en medio de inminentes decisiones y negociaciones, en un escenario donde la tensión y el sufrimiento siguen en aumento.
