El ascenso de Ozzy Osbourne en el mundo del heavy metal fue imparable, pero fue a principios de los años 2000 cuando el rockero dio un giro a su carrera en la televisión con el estreno del reality show ‘The Osbournes’. Este programa, que marcó tendencia, permitió al público conocer el lado familiar y cotidiano de una de las figuras más emblemáticas del rock.
El show se estrenó el 5 de marzo de 2002 en Estados Unidos por MTV y seguía la vida diaria del vocalista de Black Sabbath. Mostraba tanto su labor profesional como su rutina en el hogar, además de la dinámica con su esposa Sharon Osbourne, quien también fungía como su manager y tuvo un papel protagónico en el proyecto.
Sus hijos Kelly y Jack, inicialmente presentados en un enfrentamiento constante como adolescentes, mostraron una evolución en su relación y personajes, mientras que Aimee, la hija mayor, permaneció en el anonimato público pero apoyaba a la familia desde la distancia.
El reality, que mostraba una familia disfuncional, irreverente y entrañable, tuvo un total de 52 episodios distribuidos en cuatro temporadas, siendo la última estrenada en marzo de 2005, hace exactamente 20 años.
Lo que llamó la atención de la audiencia fue que el programa carecía de guiones, presentando situaciones reales del día a día familiar. Contrario a su imagen ruda y satánica, Ozzy mostraba en el programa un carácter despistado y cariñoso, complementado con sus enfrentamientos familiares, problemas domésticos, visitas médicas y momentos sin filtros, con un lenguaje a veces altisonante pero censurado.
Según informes de Forbes y The Hollywood Reporter, la familia Osbourne alcanzó ganancias de hasta 20 millones de dólares en una sola temporada, repartiendo aproximadamente cinco millones a cada integrante, cifra que pudo triplicarse hacia el final del programa.
El impacto fue tal que un solo episodio podía congregar hasta siete millones de espectadores, y el programa se convirtió en uno de los más vistos en MTV. En 2002, ganó un Premio Emmy en la categoría de Mejor Reality. Gracias a su éxito, otros artistas como Paris Hilton, Jessica Simpson, Hulk Hogan y Gene Simmons incursionaron en formatos similares.
El show concluyó en 2005, cuando Ozzy expresó que estaba cansado de que su vida privada siguiera siendo filmada. Además de mostrar lasbatallas contra la adicción de sus hijos y la lucha contra el cáncer de colon de Sharon, el programa reflejaba también los desafíos de la familia y sus momentos más humanos.
Complementariamente, la familia lanzó DVD’s con escenas inéditas y en 2003 publicó el libro ‘Ordinary People: Our Story’, aportando aún más detalles sobre su vida privada.
