
El Salón Rojo de Toluca vibró intensamente con la velada de lucha libre de la Triple A, que presentó una función llena de emociones, vuelos espectaculares y rivalidades que mantuvieron al público al borde de sus asientos. Desde niños hasta fanáticos de toda la vida, disfrutaron de un evento que combinó experiencia, carisma y nuevas promesas del pancracio nacional.
En la pelea estelar, los legendarios ‘Hell Brothers’ (Cibernético, Charly Manson y Chessman) regresaron a la capital mexiquense tras una larga ausencia. Su aparición generó euforia, aunque la victoria fue para ‘Los Ídolos’ (Octagón, Laredo Kid y Mr. Iguana), quienes lograron imponerse en un combate intenso y nostálgico.
La lucha semifinal destacó por su intensidad: los temibles ‘Psycho Circus’ (Murder Clown, Dave The Clown y Panic Clown), acompañados por El Niño Hamburguesa, enfrentaron a ‘Los Vipers’ (Abismo Negro Jr., Taurus e Histeria) junto con El Hijo del Dr Wagner Jr. La experiencia de los ‘Psycho Circus’ se impuso en una batalla de poder, generando la ovación del público.
En otro combate destacado, ‘El Negocio Traumado’ (Fresero Jr. y Atomik Star), acompañados por Monsther, midieron fuerzas contra ‘Los del Rancho’ (Jefe del Norte, Centauro y Sureño). La estrategia y unión del equipo ‘ranchero’ fue clave para obtener la victoria en un enfrentamiento lleno de rudeza y provocaciones.
La función también entregó sorpresas con la victoria de ‘Los Galácticos’ (Hijo de Olímpico, Máscara Mágica y Pegasus) sobre ‘Los Porros NG’ (Ovett Jr, Lunatik Extreme y Super Boy), gracias a su agilidad y espectacularidad que conquistaron a la afición.
Asimismo, en la lucha de relevos, El Perro Wisin y Dogman superaron a Shere Khan y Black Shadow, resaltando por su carisma y conexión con el público; además de una lucha sorpresa que incluyó a gladiadores locales, demostrando el talento emergente del Estado de México.
La afición respondió con entusiasmo, coreando los nombres de sus ídolos y reconociendo el esfuerzo de cada luchador. Eventos como este confirmaron que Toluca continúa siendo una de las plazas más fieles y apasionadas de la lucha libre mexicana, reafirmando su impacto cultural en la entidad.
Las máscaras, colores y espectáculo de la lucha libre forman parte de la identidad popular, y esta función reflejó esa tradición, disfrutada en familia con adrenalina, humor y entrega en el ring.
Con eventos como este, Triple A consolida su liderazgo en el deporte espectáculo en México, promoviendo la convivencia y llevando la magia del ring a cada rincón del país. Toluca vivió una noche inolvidable, recordando por qué la lucha libre trasciende lo deportivo y es una pasión que une generaciones.