Lo que debía ser una reunión familiar por el Día de la Madre en Guaymallén, Mendoza, terminó en una tragedia cuando un joven de 29 años falleció tras atragantarse con carne durante un asado. El episodio ocurrió el domingo por la tarde en una vivienda ubicada en la calle Silvano Rodríguez al 3900, donde familiares y amigos estaban reunidos para celebrar. Según informaron fuentes del caso a Infobae, la víctima, Gastón Hernán Moyano, estaba en casa de su hermana, Vanina, compartiendo la comida. En un momento, mientras preparaba la carne, probó un bocado y comenzó a mostrar signos de asfixia. La hermana, al llamar al 911, relató que Gastón expresó que «no podía respirar» y luego se desvaneció frente a los presentes. Personal policial y paramédico acudieron rápidamente al lugar, donde intentaron reanimarlo mediante maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP). A pesar de las esfuerzos, el joven de 29 años no pudo ser salvado y fue declarado muerto por paro cardiorrespiratorio. Aunque se presume que la causa fue atragantamiento, la autopsia determinará los detalles del fallecimiento. La Oficina Fiscal de Jurisdicción intervino, ordenando las actuaciones correspondientes y la realización del análisis forense. No se reportaron otras lesiones ni signos de violencia. En Mendoza, una fatalidad similar ocurrió en agosto en la localidad de Loncopué, donde un niño de dos años falleció tras asfixiarse con un caramelo. El incidente ocurrió antes de las 21 horas, cuando el menor fue atendido en el Hospital de Loncopué, posteriormente derivado a otros centros de salud debido a la gravedad de su cuadro, finalmente falleciendo en el Hospital de Zapala por asfixia por cuerpo extraño. En ese episodio, participaron diversos equipos médicos, enfermeros y fuerzas policiales para garantizar la seguridad durante los traslados. La tragedia en Mendoza recuerda la importancia de extremar precauciones en reuniones familiares, especialmente en actividades donde los niños están en riesgo de asfixia por objetos o alimentos peligrosos.
