Toluca coronó su primer título de Liga MX en 15 años, bajo la dirección de Antonio Mohamed, quien cumplió su promesa de devolver al equipo al protagonismo en el fútbol mexicano. La conquista fue la número 11 en la historia del club y significó además evitar que América lograra un tetracampeonato, poniendo fin a la hegemonía de las Águilas y derrotándolas en el Estadio Nemesio Díez.
Aunque Mohamed lleva solo seis meses con Toluca, el proyecto del equipo tiene más de un año de trabajo, y este campeonato es resultado del esfuerzo y la constancia de la institución. El trabajo previo de Renato Paiva durante el torneo regular fue destacado, pero la liguilla presentó desafíos diferentes, en los que el estratega brasileño no logró avanzar más allá al ser eliminado por América.
La incorporación de Mohamed representó la llegada de un técnico con experiencia en ser campeón de Liga MX en tres ocasiones, lo que aportó mayor confianza en los partidos importantes durante la fase final. Su liderazgo quedó evidenciado en los cuartos de final ante Rayados, en las semifinales con Tigres, y en la final contra América, donde neutralizó las fortalezas de las Águilas, especialmente a sus jugadores por las bandas y a Fidalgo, a quien no permitió desplegar su juego habitual.
En la campaña, Alexis Vega, que había sido dejado en libertad por Chivas por indisciplinas, regresó a Toluca, institución donde debutó y donde encontró un entorno que le permitió volver a sentirse cómodo. Se convirtió en el jugador más destacado del equipo en la temporada regular y también en la liguilla, marcando un gol y proporcionando una asistencia en la final de vuelta, contribuyendo decisivamente al título.
El éxito de Toluca también se atribuye a la capacidad de Mohamed para recuperar a jugadores talentosos en momentos clave, fortaleciendo así el proyecto.
Una de las dificultades que enfrentó el equipo fue la situación en la portería tras la salida de Thiago Volpi al inicio del torneo. Se intentó traer a Pau López desde Marsella, pero su rendimiento y lesiones no cumplieron con las expectativas. Esto llevó a confiar en Luis García, un cambio que resultó fundamental para que Toluca lograra el campeonato.