El gobierno de EE. UU. divulgó este jueves una lista de más de 500 condados, ciudades y estados que, según la Casa Blanca, dificultan la política migratoria del presidente Donald Trump. Electo en noviembre, Trump prometió luchar contra lo que denomina una “invasión” de migrantes y expulsar a quienes ingresen sin visa. Los republicanos buscan tomar medidas contra las llamadas “ciudades santuario”, que impiden a funcionarios informar sobre migrantes en situación irregular por temor a su deportación. El 28 de abril, Trump emitió un decreto anunciando la publicación de la lista, calificándola como una respuesta a una “insurrección sin ley” contra la soberanía federal. La Oficina de Seguridad Interior (DHS) acusó a estas jurisdicciones de obstaculizar “deliberada y vergonzosamente” las leyes migratorias, incluyendo ciudades como San Francisco, San Diego, Las Vegas, Nueva York, Santa Fe y Filadelfia. La DHS exige que estas localidades modifiquen sus políticas de inmediato; de no hacerlo, arriesgan perder financiamiento federal. Expertos señalan que, si bien el gobierno federal tiene jurisdicción en migración, los estados y municipios no están obligados a colaborar en su ejecución. Durante su mandato, Trump intentó retirar fondos a las ciudades santuario, pero la Corte Suprema detuvo esta medida, y en la actual administración de Joe Biden, dicha iniciativa fue desestimada.
