El Parlamento de la Unión Europea concedió el miércoles el Premio Sájarov de Derechos Humanos a la periodista georgiana Mzia Amaghlobeli y al periodista polaco-bielorruso Andrzej Poczobut, reconociéndolos como símbolos de la lucha por la libertad y la democracia. Amaghlobeli, de 50 años, se ha convertido en un emblema de la resistencia periodística frente a las crecientes tendencias autoritarias en Georgia, una nación que en el pasado aspiraba a unirse a la Unión Europea. Por su parte, Poczobut, de 52 años, fue encarcelado por sus reportajes críticos tras negarse a abandonar Bielorrusia, donde su gobierno ha desatado una fuerte represión contra la disidencia, encarcelando a cientos y obligando al exilio a muchos opositores. La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, señaló durante la premiación: “Ambos son periodistas actualmente en prisión por cargos inventados, simplemente por hacer su trabajo y denunciar la injusticia. Su valentía los convierte en símbolos de la lucha por la libertad y la democracia. La UE está con ellos y con todos quienes exigen libertad”. Creado en 1988 en honor al disidente soviético Andrei Sájarov, el galardón se otorga anualmente a individuos u organizaciones que defienden los derechos humanos o la democracia. La premiación incluye una dotación de 50,000 euros y se entregará en una ceremonia prevista para el 16 de diciembre. Tanto Amaghlobeli como Poczobut cuentan con respaldo del principal grupo político del parlamento, el Partido Popular Europeo (PPE), y del grupo de extrema derecha ECR. La periodista georgiana ha liderado investigaciones sobre gasto público y abusos de poder a través de medios independientes como Batumelebi y Netgazeti. Pese a los llamados internacionales y locales por su liberación, en agosto pasado fue condenada a dos años de prisión por cargos de resistencia y amenazas contra un funcionario. Poczobut, corresponsal de Gazeta Wyborcza, fue sentenciado a ocho años en febrero de 2023 en un fallo que Polonia calificó de injusto. Su encarcelamiento ocurrió en un contexto de crecientes tensiones entre Bielorrusia y Polonia, país que ha recibido a miles de refugiados bielorrusos desde que Alexander Lukashenko, en el poder desde 1994, intensificó la represión en su país. Los otros finalistas del premio incluyeron un movimiento estudiantil en Serbia y trabajadores humanitarios y reporteros en Gaza. El año pasado, los galardonados fueron la líder opositora venezolana María Corina Machado y su aliado, el ex candidato presidencial Edmundo González Urrutia, quien recientemente recibió el Premio Nobel de la Paz.