‘Nos estamos ahogando’, expresó Javier Reyes, residente de San Pedro Cholula, en Ocoyoacac, donde el nivel del agua supera los 40 centímetros. Las autoridades y comunidades locales reportan que la inundación continúa afectando diversas zonas desde hace más de tres meses.
El agua ha entrado en 363 viviendas, impactando a 1,138 habitantes que temen que las lluvias constantes y los desbordamientos del río Chichipicas y la laguna de San Pedro Cholula agraven aún más la situación.
Ante la gravedad de la situación, los pobladores se manifestaron frente al Palacio de Gobierno para solicitar el apoyo de vehículos vactor que retiren el agua y los residuos acumulados. Tras una asamblea en el centro de la delegación, los vecinos abordaron dos camiones con destino al centro de la ciudad para pedir también la instalación de un cárcamo de bombeo, una medida que consideran imprescindible después de más de cuatro décadas de afectaciones.
Mientras tanto, en Cholula, los residentes intentan retomar su vida cotidiana, aunque la tarea resulta muy difícil. La mayoría sale de sus hogares equipados con botas de hule, cruzar las avenidas inundadas es complicado y algunos han colocado tabiques y costales en las entradas para evitar que el agua ingrese aún más. La emergencia en la región continúa sin una solución definitiva en el horizonte.