Vecinos de Valle de Chalco rechazan construcción del Pozo 3A debido a preocupaciones sobre daños y impacto social

Por: Equipo de Redacción | 06/10/2025 16:00

Vecinos de Valle de Chalco rechazan construcción del Pozo 3A debido a preocupaciones sobre daños y impacto social

Vecinos de la colonia Jardín y zonas cercanas en Valle de Chalco expresan su rechazo a la construcción del Pozo 3A, obra impulsada por el gobierno federal como parte del Plan de Mejoramiento de la Zona Oriente, argumentando riesgos y afectaciones en su comunidad.

Desde hace meses, residentes y autoridades han sostenido mesas de diálogo para abordar la oposición local al proyecto. La principal inquietud de los vecinos es que la extracción de agua podría poner en riesgo la estructura de sus viviendas y afectar el suelo en el que habitan.

Además, los habitantes acusan que no se realizó una consulta popular previa, lo cual consideran una falta de participación comunitaria en una obra que, además, se construirá en un terreno donde hay un parque público. Temen que la construcción elimine ese espacio y deje a decenas de menores sin un lugar de recreo.

Otra preocupación importante es la falta de estudios técnicos concluyentes que garanticen que la excavación no provoque afectaciones en las viviendas, pese a que el presidente municipal Alan Velasco ha afirmado que el proyecto, a cargo de la Comisión Nacional del Agua, fue previamente estudiado como parte del Plan de Mejoramiento de la Zona Oriente.

La última movilización ocurrió el 3 de octubre, después de que en la mesa de diálogo pactada ese día no se lograra un acuerdo, ya que, según los vecinos, las autoridades municipales no permitieron una discusión abierta ni firmar un acuerdo formal.

En respuesta, el alcalde informó que en las reuniones recientes se ha brindado información técnica y se han atendido dudas de la comunidad, reiterando que el objetivo de la obra es garantizar el suministro de agua. Además, prometió que el pozo no será utilizado para carga de pipas y que el parque será rehabilitado en lugar de ser eliminado.

Hasta el momento, los vecinos no han aceptado la propuesta oficial, aunque las autoridades aseguran estar abiertas al diálogo, reiterando su intención de buscar una solución que beneficie a la comunidad sin causar daños estructurales o sociales.